martes, 31 de mayo de 2011

Educación Financiera En la Escuela



México es un país de contrastes, lo que no se enseña en las escuelas

Tiene todos los recursos para convertirse en la primera potencia del mundo, pero la mayor parte de los mexicanos lo ignoramos.

Tiene empresarios entre los ricos del mundo, pero una población mayoritariamente pobre.

Tenemos la frontera más larga del planeta con el mercado más grande del mundo, pero más que una bendición, la consideramos una maldición.

Tenemos dos litorales con grandes riquezas marítimas, pero dejamos que los japoneses vengan a explotarlos en lugar de nosotros.

Tenemos una gastronomía de clase mundial, pero quienes más la disfrutan son los extranjeros.

Tenemos 200 playas entre las más hermosas del mundo, pero quienes mas las conocen y disfrutan son los extranjeros.



¿Porque tanta pobreza?

Somos un país pobre porque se nos ha enseñado a ser pobre.

Somos pobres porque hemos tenido una educación en la que se promueve la pobreza sin que nos demos cuenta.

Hemos tenido una educación en la que se nos enseña ser empleados, no emprendedores.

Más bien se nos ha domesticado, en lugar de ser educados.

El tipo de educación ha sido un estorbo para el desarrollo del país.

En esta educación está ausente la invitación para observar en forma directa por nosotros mismos la realidad que vivimos.

SE nos enseña en las escuelas lo que debemos pensar, pero no se nos enseña a pensar.

Se privilegia la información en lugar de la imaginación y la creatividad, cuando la primera no tiene las soluciones para resolver los grandes problemas del mundo y la segunda nos puede ayudar a crearlas.

La educación actual promueve la resignación para vivir con los problemas para siempre.

El énfasis de la educación está en la información, misma que el día de mañana será obsoleta, esto hace que la creatividad y la imaginación sea más importante que la Información.



¿Que hacer?

Dado que vivimos en una economía que se ocupa de satisfacer todas nuestras necesidades, es indispensable que los niños de hoy lo entiendan perfectamente.

El sistema educativo posterga esa tarea para cuando el alumno sea grande, pero consideramos que los niños deben involucrarse desde la más temprana edad.

Los niños deben involucrarse hoy en las actividades que harán el día de mañana.

Los niños que postergan esa tarea lo harán como empleados, no como emprendedores.

Las Actividades que hacemos en nuestra escuela es que los niños le piden un préstamo a sus papás para que en la escuela hagan una manualidad o preparen algun delicioso postre, mismos que venderán entre sus familiares, vecinos o amigos.”Escuelas

Los niños se familiarizan con la materia prima, con las herramientas, con los costos y con todo el proceso de producción de un producto para su venta, de esa manera valoran el trabajo y lo más interesante es que aprenden todo esto como un juego, esto lo hace muy divertido.

Una vez que se vende el producto, se paga el préstamo y el resto se ahorra para invertirlo en la manufactura de otros postres ó manualidades para el mismo fin.

La mayor parte de los adultos se resisten a las ventas, muchos consideran esta actividad como algo denigrante, pero en realidad todos vendemos nuestro talento o nuestra capacidad para obtener recursos para sobrevivir lo más optimo posible.

Los niños a nivel preescolar y primaria en contadas escuelas en Cuernavaca aprenden todo mediante el juego, de igual manera una actividad económica la aprenden mediante el juego.

Si los niños aprenden hoy esta actividad con juegos, cuando sean grandes no opondrán ninguna resistencia al trabajo como emprendedores.

Debemos recordar que la edad preescolar y de primaria es la edad en la se establecen los hábitos, los usos y costumbres que perdurarán por el resto de la vida de los niños.

Muchos de los grandes millonarios aprendieron este hábito desde pequeños partiendo de una condición humilde y llegaran a ser los grandes empresarios de hoy.

Muchos padres de familia llevan a sus hijos para que aprendan a leer y a escribir, pero estas solo son las herramientas para involucrarse en la vida.

La verdadera motivación está en soñar en ser, hacer y tener todo para un mundo empresarial.

Este taller de educación financiera en nuestra escuela nos permite concebir en nuestros niños a los grandes empresarios del futuro, muy a pesar de vivir en condiciones difíciles.

Nos permitirá que los niños le den el justo valor al dinero y a las actividades que se realizan en nuestra institución.

Permitirá que nuestros niños cultiven el hábito del ahorro.

Les permitirá vislumbrar a nuestros niños un futuro promisorio para ellos y para sus descendientes.

Este taller será una fuente de motivación para esforzarse cada día.

Contribuirá a que los niños puedan lograr su independencia financiera a una edad temprana, como nunca antes en la historia de la educación.

Podrán entender que no son indispensables las tierras, las fábricas o los medios de comunicación para ser ricos como en el pasado, puesto que ahora solo dependerá de su propio talento personal, que es precisamente lo que desarrollamos en nuestra institución.

Podrá entender que la esencia de la vida es servir a los demás, no solo el dinero.

Esperamos que a partir de esta experiencia se impulse la educación financiera en la escuela primaria y preescolar.

En la secundaria se estará en condiciones de emprender otro tipo de negocios un poco más complicados, que de ser bien asesorados serán muy exitosos.

Los alumnos de la preparatoria estarán en la condición de valorar los recursos que existen en el país y a partir de ahí se podrán diseñar grandes proyectos que de ser posible se puedan llevar a cabo.

En la licenciatura se podrá contar con toda la información en cuanto al diseño técnico como de financiamiento y necesariamente deberán egresar de las universidades con un proyecto andando.

Con una educación financiera a todos los niveles le podremos decir adiós a la pobreza a la vuelta de unos cuantos años.

Una escuela en Cuernavaca que es recomendada ya por su experiencia en este tipo de enseñanza financiera es el Colegio Tohui de Cuernavaca. En hora buena por estos pequeños, futuros millonarios de Morelos.

Por Ernesto Partida Pedroza

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